Crónica: Sónar de Día 2014

Sónar cerró un año más su edición de Barcelona con una serie de actuaciones únicas, trayendo lo mejor de la escena electrónica a la ciudad condal donde más de 109.000 asistentes disfrutaron de shows tan exclusivos como DESPACIO (James Murphy + 2manydjs) o el nuevo espectáculo de Plastikman con su única actuación en Europa.

Sónar de Día alcanzó la cifra récord de 52.000 asistentes siendo el mejor registro del Festival hasta la fecha, y no era para menos, Sónar de Día es sin duda lo que marca la gran diferencia respecto al resto de festivales, con una programación y sobre todo un marco único, con un ambiente distendido y amable hacen de Sónar de Día con lugar idílico para todos los amantes de la música.

Nev.Era se encargó de dar el pistoletazo de salida el Jueves con su «Presión Profunda», un arranque espectacular que comenzaba a posicionar la jornada del Jueves como una de las más interesantes del festival convirtiéndose en la gran «tapada» de esta nueva edición de Sónar con algunas actuaciones memorables.

Acid, house y techno fue la propuesta de Harald Björk en el Dôme en una sesión bastante equilibrada y una buena selección de temas, después de ver al japonés Emufucka que se dividió entre momentos memorables a ritmo de trap como alguna selección poco adecuada, era el momento de disfrutar en Sónar Village de la danesa MØ que brilló con luz propia después pudimos ver a Ryan Hemsworth con una sesión algo discreta.

Sonar Hall vivió uno de los mejores directos del Jueves, el alemán Nils Frahm se convirtió en uno los grandes triunfadores de Sónar, con una sesión melódica, experimental y evocadora acompañada de unas visuales que se fundían con el piano y sintetizadores del alemán, Ben Frost en Sónar Complex acompañado de batería y percusionista nos ofreció un agresivo live se convirtió en lo más destacable que se vio en Sónar Complex ese día.

El show Objekt de Plastikman en su única presentación en Europa, fue uno de los atractivos de Sónar Día, una impresionante puesta en escena con un monolito gigante proyectando imágenes a la vez que sonaban los acordes del último álbum de Richie Hawtin como Plastikman, un show que dividió al público y puso el broche al primer día de Sónar.

El viernes, de nuevo resultó complicado decantarse entre las muchas actividades paralelas a la música que ofrecía Sónar pero había que sacar tiempo para deslumbrarnos por las apuestas que se mostraban en Sónar+D, además de la gran sorpresa de «Machine Variation: Bernier + Messier» que al igual que DESPACIO, que hablaremos más adelante, estuvieron presentes las tres jornadas de día.

El primer plato fuerte del día fue el madrileño Henry Saiz que se encargo de ponernos a tono junto a su banda en un live con un aire retro muy acertado para un día que estuvo marcado por la gran carrera de media tarde en la que se juntaron los shows más destacados del día, antes de comenzar a correr como locos de un lado para otro, mientras Simian Mobile Disco se plantaban con su Whorl en Sónar Hall, en Sónar Village, FM Belfast encandilaban a los presentes con su pop electrónico, un tono alegre y distendido, dieron algo de frescura ante el sol que asomaba en el stage, dejaron un gran sabor de boca entre los presentes.

De 19:30 a 22:00, pudimos vivir los mejores momentos de Sónar de Día del Viernes, nos perdimos la apuesta experimental de Oneohtrix Point Never pero pudimos ver un momento a Bonobo que se reafirmó ante el público con un directo impecable, al menos el poco tiempo que pudimos verle ya que la gente empezaba a acudir en masa de nuevo a Sónar Hall para presenciar la increíble actuación de Jon Hopkins, muchos eran los que tenían ganas de ver la interpretación de su álbum «Immunity», ante un Sónar Hall donde no entraba ni un alma más el londinense propuso un directo que quedará archivado como uno de los momentos clave de la historia de Sónar.

Mientras en Sónar Village, Theo Parrish no llegó a conectar, apenas pudimos verle algo más de 15 minutos, pero por lo que comentaba algunos de los asistentes, el de Detroit andaba algo cabreado, entre otras cosas al parecer había olvidado sus maletas en el hotel, todo indica que finalmente se solucionó.

Bonobo Live Sónar:

Después de dos día de auténtica locura, el cuerpo apenas aguantaba, pero Vallès nos reactivo con su dj set que desprendió el buen rollo que necesitábamos a estas alturas de festival y viendo el día lleno de encuentros imprescindibles que nos quedaba aún por delante, nos quedamos en Sónar Village para ver al canadiense Kid Koala y su Vinyl Vaudeville 2.0, bailarinas y marionetas acompañaban al maestro Kid Koala envuelto en su traje de Koala que terminó dándose un baño de masas.

Era el momento de cambiar de escenario y visitar el Dôme, allí Dâm-Funk hico bailar a todo el personal a ritmo de funk y disco, que calentó el recinto para la entrada en escena de uno de los directos que más esperábamos del Sábado: TOKiMONSTA. La artista de Los Angeles con orígenes koreanos encandiló al público en el bolsillo con un directo impecable, soltando un recital de temas que giraron entre future bass, trap melódico y ritmos rápidos de rap que enloquecieron a un Dôme a rebosar.

Mención aparte merece la que sin duda para la gran mayoría fue uno de los grandes reclamos de Sónar de Día, el proyecto DESPACIO de James Murphy y 2manydjs que hicieron su particular maratón durante las tres jornadas de día de Sónar, un total de 18 horas en un espectáculo que permanecerá para siempre en la retina de los miles de asistentes que gozaron del espectacular escenario circular con 50.000 vatios de potencia de McIntosh, mientras estos gigantes le sacaban brillo a su colección de vinilos, de lo mejor que se ha podido ver en los últimos años, y uno de los muchos aciertos de Sónar para la edición 2014.